La comida mexicana es una de las más diversas, pero también más raras del mundo.
Debido a esto, la UNESCO, le otorgó el nombramiento de Patrimonio Intangible de la Humanidad.
Suele pensarse que uno de los detonadores para que la comida mexicana fuese tan variada fue el uso de chile en sus alimentos. Este aliciente, de algún modo, volvió más atrevida la concepción sobre la alimentación y sus posibilidades. Y la premisa anterior parece ser cierta, el mexicano antiguo hizo prácticamente uso de la totalidad de menesteres posibles que le rodearon para adoptarlos en su dieta.
Por ello existen platillos cuyos ingredientes principales parecerían una broma en otros lugares, sin embargo, son parte de la riqueza culinaria que aún hoy, luego de milenios, continua retando la concepción gastronómica en muchas partes del mundo.
Y es que nuestras curiosas combinaciones hacen de estos platillos únicos por ello aquó presentamos un recuento de los platillos mexicanos que tienes que probar:
Caldo de oso
Para este rico antojito, basta mezclar un poco de jícama y pepino picados con otra fruta de tu elección (aunque la piña y el mango son las más populares). A eso se le agrega vinagre (de preferencia de piña), limón, sal, chile en polvo, y se remata con bastante queso Cotija rallado. Esta es una botana muy tradicional de León, Guanajuato.
Bombas
Cuentan las lenguas que son una creación del tradicional café La Parroquia, en el puerto de Veracruz,
La base de este platillo son dos ingredientes: una concha de pan dulce rellena y frijoles. Para acompañar esta delicia, no puedes olvidar un delicioso lechero (como algunos llaman al café con leche) y también se le puede agregar nata y queso. Eso sí, los más valientes le añaden hasta carne y requesón. ¡Ah, claro y no pueden faltar unos chiles por si les hace falta algo más de sabor!
Dorilocos
A los mexicanos nos cuesta mucho trabajo aceptar la comida tal cual está. Por eso, siempre le agregamos nuestro toque personal, y este plato es el ejemplo perfecto. Los ‘Dorilocos’, como su nombre lo indica, son unos Doritos ‘locos’. Son una combinación perfecta entre lo crujiente de la botana frita, más cacahuates japoneses, gomitas, cuerito, verduras, frutas, limón, salsas picantes e incluso, un poco de queso fresco. Tú eliges si los quieres con todo o no. Son una locura y hasta la revista Eater llegó a considerarlos la botana más loca del mundo. Vale la pena probarlos, en serio.
Guajolota
En México el desayuno es un tema serio. Los mexicanos tenemos infinidad de opciones para el alimento más importante del día. Pero, lo mejor para empezar el día y asegurarte una dosis calórica suficiente, es la torta de tamal o guajolota, una combinación tan común en nuestra idiosincrasia que hasta nos extraña que el mundo la mire con recelo. La receta es también muy simple: se abre un bolillo por la mitad, se le mete un tamal, sin importar el sabor, ¡y listo!
Torta de chilaquiles
hablando de desayunos, no podemos dejar de mencionar otra mezcla de masas, proteína y picante: la torta de chilaquil. La guajolota, promete una alta dosis de calorías que te mantendrá saciado durante casi todo el día. Esta creación tampoco tiene mayor ciencia. Bolillo, frijoles, pollo, chilaquiles verdes, rojos, o combinados queso y crema. Es una de las combinaciones que más causa controversia entre las personas.
Tecolotes
No es más que un mollete. Medio bolillo, cubierto con frijoles refritos y queso gratinado. Bañados en chilaquiles verdes o rojos. Son originarios del restaurante Sanborns. Y no, no son aceptados en ningún tipo de dieta para bajar de peso. Pero, reconozcámoslo, son buenos como desayuno comida o cena.